La Nueva Empleada [Capítulo 3]

CAPÍTULO 3

Alejandro se agacha a la casita de perro y ve a Nataly muy nerviosa que baja su mirada avergonzada.

Ricardo: (riendo) Ese viaje te hizo de buen provecho, porque regresaste muy cambiado.

Alejandro: (levantándose) Si sigues hablando, te juro que te rompo la cara (deja de reír y se sorprende). ¡Así que cállate! (Nataly se lleva las manos a la boca) Rosita era una mujer mayor, sin familia, no tenía a donde ir. Como yo no estaba aquí, debiste al menos cuidarla, ¡tendrías que haberme llamado idiota! ¿Si ella muere? Si está sola y enferma, ¿¡entonces qué!?

Ricardo: ¡Cielos! Yo pensé que lo sabías. Creí que ella antes de irse, te lo diría.

Alejandro: ¿Quién la despidió?, ¿quién cocina entonces?

Ricardo: ¿Crees que Madam es quien cocina? (le hace una seña hacia la casita de perro).

En ese momento llega un auto en donde están Nicole y Rogelio. Ambos se bajan y se acercan a Alejandro y Ricardo.



Ricardo: Dice que es Alejandro.

Ricardo señala a Alejandro, sorprendiéndose Nicole y Rogelio.

Nicole: ¿Y la sirvienta?

Alejandro: (a Nataly) Sal sirvienta.

Alejandro en vista de que Nataly no sale, se agacha a la casita de perro.

Alejandro: Dije que salieras (se levanta y Nataly sale).

Rogelio: Vamos adentro (entra a la casa con Nicole)

Ricardo: (a Alejandro) Tu padre dijo que entraras.

Momentos después, Nataly, Alejandro y Nicole están reunidos en la sala de la casa Morales. Rogelio estaba en la habitación de Mateo asegurándose que aún esté dormido, pero luego se ve entrando a la sala de la casa y se sienta en un sofá con Nicole. Nataly y Alejandro están parados.

Nicole: (a Alejandro) ¿Hoy no era el día en que llegabas, no?

Alejandro: Llegué un día antes.

Alejandro mira a Nataly que está a su lado con la mirada agachada.

Rogelio: ¿Y ya comiste algo?

Nicole: (sonriendo) Estoy segura que no.

Rogelio: Entonces, dúchate y luego baja a comer (a Nataly). Sirvienta, prepara el almuerzo.

Alejandro se sorprende dándose cuenta que Nataly si es quien cocina como Ricardo había dicho.

Nicole: ¿Qué haces sirvienta?, ve a preparar algo.

Nataly: Sí, Madam.



Nataly que estaba distraída, se va a la cocina aún avergonzada por Alejandro. Allí se queda pensativa, pero al instante sacude su cabeza y empieza a hacer algo de comer.



Más tarde, Alejandro, Nicole, Rogelio y Mateo están comiendo en el comedor de la sala. Nataly también está presente.

NOCHE
CASA DE FERNANDO
HABITACIÓN DE FERNANDO

Ha llegado la noche. En la casa de Fernando, éste se encuentra en su habitación sonriendo frente a su caja fuerte que acaba de abrir. En la caja fuerte, hay una fuerte cantidad de billetes acumulados, cheques y algunas piezas pequeñas de oro. De repente siente que alguien se acerca. Es Paty, que es su sirvienta. Fernando rápidamente cubre la caja fuerte con un cuadro que la ocultaba. Paty finalmente entra a la habitación.



Paty: La cena está lista señor, ¿quiere que le traiga?

Fernando: (sonriendo) No, ya voy para allá, no te preocupes y te puedes retirar.

Paty sonríe y sale de allí.

AL DÍA SIGUIENTE
CASA MORALES
SALA

Alejandro, Nicole y Rogelio están sentados en los sofás de la sala de su casa.



Alejandro: ¿Dónde está la abuela?, ¿por qué no está aquí?

Rogelio: Porque…

Nicole: (interrumpiéndole) Se fue por su cuenta, ¿cómo íbamos a despedirla?

Alejandro: La abuela no me hubiera dejado

Nicole: Se fue inmediatamente cuando partiste.

Alejandro: Está bien si la abuela vuelve, ¿cierto?

Nicole: Como quieras.

CUARTO DE NATALY

Nataly está en su pequeño cuarto, de repente Alejandro entra, ella se sorprende.



Nataly: ¿Quién dijo que puedes pasar? Aunque no es mi casa, este es mi cuarto de servicio, es mi espacio personal.

Alejandro: (cerrando la puerta) ¿No me invitas a sentarme? (se sienta) Siéntate (Nataly se sienta). Dime la verdad. En los tres años que estuve fuera, ¿qué pasó en la casa?

Nataly: Cuando llegué al vecindario, Madam me preguntó si sabía cuidar de un bebé. Sin dinero y a donde ir, debido a que mi padre le hizo una cosa terrible a mi amiga, le pedí habitación, comida y paga. Le dije que cuidaría al bebé y haría la limpieza, entonces ella me pagó el doble. Por eso ahora, estoy aquí (Alejandro le hace una seña para que siga contando). Es todo (le vuelve a hacer la misma seña con la mano). No hay nada más que contar.

Alejandro: ¿Quién dijo que quería saber sobre ti?

Nataly: ¿No eres su hijo, verdad?

Alejandro: Lo soy (se acerca a la cara de Nataly y le habla en voz baja). ¿Viste cómo la insultaron y menospreciaron? (Nataly lo niega con la cabeza). ¿Molestaban a la abuela?
Nataly lo vuelve a negar con la cabeza y Alejandro se levanta, acercándose al clóset donde está la ropa de Nataly. Lo abre y ve una maleta.

Alejandro: Aquí está.

Momentos después, Alejandro sale del cuarto de Nataly con la maleta en sus manos. Ella lo sigue.

Nataly: ¿Por qué haces esto?

Ambos siguen caminando hasta llegar a la sala. Nicole y Rogelio también llegan.



Alejandro: (a Nataly) Lo siento (le arroja la maleta al piso).

Nataly (sorprendida): ¿Qué dices?

Alejandro: Estás… despedida.

FLASHBACK
CASA MORALES
SALIDA

Rosita está afuera y Nicole viene con una maleta que es de ella. Es de noche. Nicole le arroja la maleta en las piernas y se cruza de brazos.



Nicole: Estás despedida. Vete. Debió conoció su nivel, sirvienta. Soy la dueña de la casa y usted sólo la sirvienta. ¿Cómo se atreve a responderle a la dueña? Aunque llevara diez años en esta casa, no es manera de comportarse.

FIN DEL FLASHBACK



Nicole había acabado de recordar cuando despidió a Rosita, siendo la misma manera en como Alejandro despide a Nataly.

Nataly: ¿Qué hice mal? (enojada). ¿Por qué me despide?

Alejandro: La abuela pronto regresará a trabajar a su verdadero lugar. Ve a tu casa.

Nicole: Yo estoy a cargo de la casa. Si despide a la sirvienta, entonces desde mañana, ¿quién va a limpiar, cocinar y cuidar al niño?

Alejandro: (a Nicole) Pero madre, tú estás aquí.

Nicole: ¿Parezco sirvienta?, ¿crees que me casé para hacer todo ese trabajo?

Rogelio: Suficiente.

Alejandro: (gritándole a Nataly: ¡Fuera! (ella se sorprende)

Nicole: (a Alejandro: ¿Quieres volverme loca?

Rogelio: ¡Es suficiente!



En ese momento viene Mateo bajando las escaleras que había allí triste.

Rogelio: (a Alejandro) Durante tres años, estuviste aquí divirtiéndote y haciendo lo que quisieras. ¿Por qué tan pronto llegas te quejas con el asunto del personal? (gritando) ¡Una sirvienta es una sirvienta!, ¡una cocinera es una cocinera! (Nataly agacha la cabeza) Si te vas a comportar así, empaca tus cosas y regresa de nuevo a Boston. ¡Inmediatamente!

Mateo empieza a llorar, todos lo miran. Nataly después de un pequeño momentos, coge su maletín y va a su pequeño cuarto. Mateo la sigue llorando.



Mateo: (llorando) ¡Sir-vien-ta! (Nataly abre el clóset y empaca más ropa que tenía) ¡Por favor no te vayas! Por favor…

Nataly mira triste a Mateo, pero al instante, sigue empacando su ropa. Al terminar, cierra el maletín y sale del cuarto, Mateo tras ella.

Mateo: (llorando) No te vayas… no te vayas… no te vayas.

Ambos llegan a la sala, Nicole se va y Rogelio sigue tras ella. Nataly dispuesta a irse, se dirige a la salida de la casa con los ojos húmedos, pero se detiene, suelta su maletín y va hacia Mateo, se agacha y lo abraza.



Alejandro al verlos, inmediatamente se acerca y le quita Mateo a Nataly, lo carga.

Alejandro: (a Nataly) Vete (hace una pequeña pausa). ¡Lárgate!

Alejandro se lleva a Mateo, dejando a Nataly muy triste que también se va. Saliendo de la casa, se dirige a la casa de Ricardo, que es donde sus amigas pasan el rato libre en el cuarto de Antonia.

CASA DE RICARDO
CUARTO

Antonia, Paty, Lucía y Carmen están sentadas en el piso, viendo televisión y esperando nuevamente el resultado de la lotería. De repente Nataly llega al pequeño cuarto.



Carmen: ¿Por qué llegas a esta hora? El sorteo ya va a comenzar.

Nataly también se sienta con su maletín y el presentador del programa de lotería, empieza a digitar los números ganadores.

Presentador: Comencemos…

Lucía: (a Nataly) Dame el boleto, tú lo tienes, ¿verdad?

Nataly se limpia las lágrimas que le habían caído y le entrega un saco a Lucía en donde está el boleto de lotería.

Nataly: Toma.

Paty: Che, ¿estás bien?

Nataly: (ignorándola triste) El boleto está en el bolsillo derecho del saco.

Presentador: El primer número es (Lucía saca el boleto del saco de Nataly) 19.

Lucía: ¡Bien! Tenemos el 19.

Presentador: El segundo número, es 36 con bola gris.

Lucía: ¿Qué dijo?

Carmen: ¡36!

Lucía (emocionada): ¡Tengo un buen presentimiento!

Presentador: La tercera bola es amarilla y el número es el 10. La cuarta bola, es del mismo color y el número es 7.

Paty es quien está más preocupada por Nataly ya que la ve triste. Se acerca a ella, le pone el saco que tenía puesto a Nataly, mientras que sus otras amigas siguen escuchando el número ganador de la lotería.

Presentador: El quinto número es el 22 y la bola es roja.

Paty: (a Nataly en voz baja) ¿Qué tenés?

Presentador: La sexta bola nuevamente es amarilla y el número es el cuatro. Y el último número es el 17 con bola azul.

Lucía (desilusionada): Perdimos.

Nataly suelta una lágrima, todas las empleadas la ven y les da curiosidad.

Carmen: (acercándose a Nataly y estrujando a Paty): ¿Qué pasa? ¿Te dijo algo malo la vieja esa, Madam? Tú nunca lloras, ¿qué sucedió?

Lucía: (acercándose a Nataly y estrujando a Carmen) ¿Te dijo algo malo el esposo de Madam?

Antonia: (también se acerca estrujando a Lucía) No lo creo, eso son tonterías.

Nataly (triste): Me despidieron (todas se acercan sorprendidas)

Carmen: ¿¡Qué!? ¿Quién?

Nataly: El hijo.

Antonia: ¿Desde Boston?

Nataly: Volvió hoy.

Lucía: ¿Te despidió tan pronto volvió?

Carmen: ¿Dejaste una piedra en el arroz?

Antonia: ¿Es posible? El hijo es muy dócil como un panda.

Lucía: Sí.

Nataly: Por eso…

MÁS TARDE
CASA MORALES
ESTUDIO

Alejandro está en el estudio de su casa, se acerca al escritorio y abre uno de sus cajones. Allí, ve la servilleta en donde está anotado el número celular de Nataly. En ese momento llega Ricardo, cerrando rápidamente Alejandro el cajón el escritorio. Ricardo va hacia Alejandro y pone una cerveza en el escritorio.



Alejandro: (coge la cerveza) Tuve que echarla para poder traer de vuelta a la abuela.

AL DÍA SIGUIENTE
SALIDA DEL VECINDARIO
CARRETERA



Nataly lleva en sus manos su maleta, pasa por la carretera de la salida del vecindario.



Allí, aparecen Alejandro y Ricardo trotando. Ricardo mira a Nataly pero luego sigue trotando con Alejandro. Momentos después, Nataly está pasando por el almacén en donde venden billetes de lotería. En el almacén, hay un cartel que tiene varios números ganadores, sin embargo, Nataly sigue dirigiéndose a la casa de su amiga Andrea que queda más delante de allí. Minutos después, cuando llega, se va al patio de la casa y se acerca a Andrea que está doblando la ropa que acabó de lavar.



Nataly: Cocina algo para mí, quiero comer algo.

Andrea: ¿Por qué?, ¿a dónde fue tu familia? (refiriéndose a la familia Morales)

Nataly: ¿Familia! ¡Mentiras!, ¿qué familia tengo?, ¿por qué esos idiotas son mi familia? Si no me tratan como familia, no valen la pena. Dame algo de comer, tengo hambre.

CASA MORALES
COCINA

Mateo llega corriendo a la cocina sonriendo y olvidando que Nataly fue despedida.



Mateo: (sonriendo) ¡Dame algo de comer! (ve que en la cocina no hay nadie y se pone triste)

CASA MORALES
CUARTO DE JOYAS



Nicole está en el cuarto de joyas, de allí, coge un lujoso collar y se lo pone sonriendo vanidosamente. Después, observa todo el lugar, nuevamente sonriendo.

CASA MORALES
ESTUDIO PERSONAL DE ROGELIO

Rogelio está en su estudio, viendo un documento. En ese momento viene Alejandro.



Rogelio: A partir de mañana, empezarás a trabajar en la compañía.

Alejandro: ¿Lo recuerdas verdad? Aclararías todo cuando yo volviera (hablando de Mateo).

Rogelio: ¿De qué sirve ahora? Si Mateo pasa a ser mi hijo, eso no sería benéfico para ti. Es como si hubiera un dólar, tendría que dividirlo. En vez de todo, tú tendrías sólo la mitad.



Mientras ambos hablaban, Nicole viene por un pasillo con un collar. Cuando iba a entrar al estudio de Rogelio, se detiene y los escucha hablar.

Alejandro: ¿Crees que el dinero es lo que me preocupa?

Rogelio: (sonriendo) Por supuesto.

Alejandro: Aún así, no está bien que tu hijo se convierta en el mío.

Nicole acaba de escuchar las últimas palabras de Alejandro. Sintiéndose engañada, con mucha rabia estira el collar, el cual se rompe y las perlas caen al piso. Ella se va.

VECINDARIO
CERCA DE LA CASA MORALES

Paty, Antonia, Lucía y Carmen están reunidas cerca de la casa. Nicole necesita a una de ellas, sin embargo ninguna desea ir.



Carmen: La Madam nos necesita a una de nosotras, ¿quién quiere ir?

Lucía: Aunque están pagando más de 100 dólares, creo que no es correcto ir. ¿Acaso no fue en parte culpa de ella que despidieran a Nataly?

Paty: Lucía tiene razón che, no deberíamos ir ninguna de nosotras. No sé ustedes boludas, yo no iré (cruza los brazos decisiva)

Antonia: Sí, recordemos las cosas horribles que le hizo a Nataly.

Carmen: Tienen razón, no vayamos. Hagámosla sufrir con nuestra decisión.

CASA DE ANDREA
HABITACIÓN

Andrea lleva en una bandeja, tres platos con comida y tres vasos de leche a la habitación en donde Nataly está dormida. Abril, la hija de Andrea también está en la misma habitación jugando con juguetes. Andrea pone la bandeja en una mesa pequeña que había allí.



Andrea: (a Abril) Ven a comer con mami y tu “tía”.

Nataly se despierta y se acerca a la pequeña mesa a comer con su amiga y con Abril a quien considera su sobrina. Andrea toma una cuchara, saca sopa de unos de los platos y se los da a Abril.

Nataly (molesta): ¿¡Qué hiciste con el dinero que te mandé!? ¿Cómo puedes darle esto a tu hija?, ¿crees que ella crecerá sana? ¡Lo que en verdad necesita no se lo das!
Andrea: ¿Cómo te atreves a hablarme así?

Nataly: ¿Qué hiciste con el dinero? Nada más mira como se viste tu hija, debería tener mejor ropa.

Andrea: ¡Ya Nataly! ¿Qué crees que hice con el dinero que me mandaste?, ¿crees que me iba a gastar ese dinero que es tuyo sabiendo como te lo ganas? (Abril le sonríe tiernamente a Nataly) ¿Qué te pasa hoy?

CASA MORALES
COMEDOR



Alejandro, Nicole, Rogelio y Mateo están en el comedor. Un repartidor de comidas a domicilio, pone varios platos en la mesa tapados con una bolsa transparente. Al terminar, se despide y se va.



Después de llegar la noche, Nicole y Rogelio están en su habitación. Él duerme mientras que Nicole está levantada de la cama, mirándolo fijamente y muy seria.

AL DÍA SIGUIENTE
VECINDARIO

Braulio, el padre de Nataly llega al vecindario, mira todo muy confundido. Se acerca a la casa Morales justo cuando Alejandro sale.



Braulio: Buenos días, ¿por favor podría decirle a Nataly que su padre está aquí?

Alejandro lo mira muy desconcertado.

PARADERO DE AUTOBÚS

Nataly está sentada en una banca en donde se espera el autobús pero no lo esperaba, solo está sentada allí leyendo un periódico de clasificados para buscar trabajo. Después de un pequeño rato, se rinde y se levanta. Cuando se iba a ir, se le cae un pequeño monedero, lo recoge y lo abre. Ve que tiene un boleto de lotería y un dólar.



Nataly: Por lo menos con esto alcanzo a comprarme un plato de fideos.

CARRETERA

Ricardo está conduciendo en su auto, dirigiéndose al cementerio.



Ricardo: Mis padres me van a maldecir por no visitarlos en mucho tiempo. ¡Ah ese Alejandro! Le dije que me acompañara y no quiso...

PEQUEÑO RESTAURANTE



Nataly se está comiendo un plato de fideos en un pequeño restaurante. Mientras comía, leí un periódico que está allí.

En el periódico: El número ganador de la lotería es el 334 y el premio mayor es de 13 millones de dólares.

Nataly curiosa saca de su bolso su billete de lotería, lo pone al lado del periódico.

Nataly: Veamos.

La persona que le sirvió el plato de fideos, está recogiendo los platos sucios de otras mesas y le pregunta a Nataly.

Atendedor: ¿Quieres más rábanos?

Nataly: Sí.

Atendedor: ¿Y cebollas?

Nataly no responde, porque está muy sorprendida comparando su billete de lotería con el periódico. Es imposible para ella ver lo que está viendo. Los números que están en el periódico son completamente iguales a los de su billete de lotería. ¡¡¡Nataly se ha ganado la lotería!!!

MINUTOS MÁS TARDE
CEMENTERIO

Nataly está frente a la tumba de su madre, llena de felicidad. Recuerda cuando compró dos billetes de lotería en un almacén, uno de ellos lo compró especialmente dándole tributos a su madre y justamente ese billete de lotería, fuel el que ganó. Deja de recordar y se sienta de rodillas en la tumba de su madre muy agradecida.



Nataly: ¡¡¡Muchas gracias mamá!!!

Nataly se levanta y empieza a gritar de alegría. Un jardinero está cerca de allí, la mira extraño por la actitud de Nataly.

Nataly: (deja de gritar) Te amo mamá, te amo papá, ¡te amo mundo! (gritando). ¡¡¡Te amo Nataly!!!



Lo que Nataly no se esperaba, es que Ricardo está en el mismo cementerio. Éste está sentado al lado de la tumba de sus padres, muy cerca de donde está Nataly, mira muy sorprendido.